Santiago de Liniers

El 25 de junio de 1806, en la zona ribereña de Quilmes, desembarcan tropas británicas con poco más de 1.600 soldados de la infantería a las órdenes del Brigadier General William Beresford. Las defensas porteñas, dispuestas por el Virrey Sobremonte, son sobrepasadas rápidamente y las tropas inglesas pueden hacerse cargo del gobierno de Buenos Aires el 28 de junio, apenas tres días después del desembarco.

De inmediato y en Montevideo, Santiago de Liniers junto con el gobernador Pascual Ruiz Huidobro, prepara la reconquista.

El 4 de agosto desembarcan en la actual localidad de Tigre y se dirigen a la ciudad de Buenos Aires, acampando en la Chacarita y en los Corrales de Miserere, donde se suman nuevos hombres a las fuerzas de la reconquista.

El día 10 de ese mismo mes, los criollos marchan hacia el viejo parque de artillería de la ciudad y el 12 logran derrotar al destacamento inglés. Desde allí avanzan hacia la Plaza Mayor, principal bastión de las fuerzas inglesas, lo que le impide a los británicos cualquier conexión militar con sus fuerzas que se encontraban en las afueras de la ciudad.

La suerte estaba echada y el general Beresford se ve obligado a capitular ante Santiago de Liniers.