El voto femenino tenía una larga trayectoria de debate en la sociedad. La primera mujer que votó en el país y en América latina fue la, también, primera médica argentina, Julieta Lanteri, tras conseguir a través de un amparo judicial que se la incorporara al padrón electoral en 1911.

«Julieta Lanteri – primera mujer que logró votar en Argentina y América Latina, quinta mujer en recibirse de médica, fundadora y candidata por el Partido Feminista Nacional -, llegando a los comicios para depositar su voto, 1911.»

En 1921, el ala femenina del Partido Socialista promovió los ensayos de voto femenino con motivo de las elecciones municipales. Le siguió San Juan, que en 1927, luego de reformar la Constitución provincial, permitió la participación de las mujeres en la elección de cargos públicos.

La ley de 1946 consagró, de manera definitiva, el derecho de las mujeres a votar. Para celebrar su sanción, la CGT convocó a un acto el 23 de septiembre en la Plaza de Mayo. Allí, la primera oradora, Eva Perón, con un ejemplar de la ley en su mano afirmó: “Mujeres de mi patria, me tiemblan las manos al contacto del laurel que proclama nuestra victoria”. “Aquí está resumida en la letra apretada de pocos artículos una historia larga de luchas, tropiezos y esperanzas –añadió-. Por eso hay en ella crispaciones de indignación y sombras de amenazadores, pero también alegre despertar de auroras triunfales. Esto último traduce la victoria de la mujer sobre las incomprensiones, las negaciones y los intereses creados de las castas repudiadas por nuestro despertar nacional.”

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